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jueves, 31 de enero de 2013

Ana Margarita Fuschini Dartigolles. A 100 años de su nacimiento


Mi Madre, Ana Margarita Fuschini Dartigolles, fue hija de José Octavio Fuschini y de Margarita Dartigolles. Nació en la ciudad de Buenos Aires el 1º de Febrero de 1913.

Mañana, 1º de febrero de 2013, mi Mamá hubiera cumplido 100 años. Creo que ésta es una buena ocasión para recordarla.



Ana Margarita fue la mayor de siete hermanos. Fue una persona muy especial, muy ecuánime. Supo enseñarnos a vivir con honestidad y tolerancia, y nos transmitió las demás “cosas de la vida” de una forma objetiva. Fue una persona que supo hacer los “silencios” en los momentos necesarios. Fue una madre adelantada a su época, porque nos dio libertad en nuestra adolescencia para hacer lo que decidiéramos, cosa poco común en esos años de las décadas de los ’60 y ’70.

Tímida por naturaleza, posiblemente debido a sus problemas de vista, más creo yo, por la forma en que se desarrolló su niñez y su adolescencia. Estudió en la Universidad Nacional de La Plata entre los años 1936 a 1942. Se recibió de Profesora de Matemáticas y Física. Allí conoció a “Vito”, su marido y mi Padre, y se casaron por Civil en Montevideo (Uruguay) y por la Iglesia en Buenos Aires. Dedicó toda su vida profesional a la carrera docente en escuelas de nivel secundario de Buenos Aires y San Juan, y en el Instituto Nacional del Profesorado Secundario de San Juan.

La historia de mi mamá no fue fácil de investigar, porque tuve que leer muchas cartas para sacar mis conclusiones de cómo fue su vida. Ella nunca comentó su infancia, ni tampoco cómo pasó su adolescencia. He concluido, luego de reunir toda la información contenida en esas cartas familiares, muchas manuscritas, casi todas “amarillentas por el paso del tiempo”, que “Mamita” como nosotros la llamábamos en casa, no tuvo una vida fácil desde su niñez.

En su primera infancia vivió algún tiempo en Buenos Aires con sus padres y cuando José fue a trabajar a la Patagonia, su mamá Margot se trasladó a la casa de Martha, su hermana, que vivía con su marido en Alberdi, en la Provincia de Buenos Aires.

Año 1913 - Margot y Anita


Cuando Mamita nació en 1913 fue anotada en el Registro Civil como Ana Margarita y 5 años después, el 26 de agosto de 1918, mis abuelos Margot y José se presentaron en el Registro Civil de la ciudad de Buenos Aires y la reconocieron como hija de ambos. La correspondiente Acta fue firmada por Mario Fuschini (hermano de José) y Manuel Sanchez Zinny, en calidad de testigos. En ese documento quedó asentado el domicilio de mis Abuelos y mi Madre en la casa de la calle Entre Ríos 2060 de la ciudad de Buenos Aires, propiedad de mi abuelo José. Esta casa estaba enfrente de la casa que siempre habitó Mario Fuschini en Entre Ríos 2025.

Mi Abuelo José volvió de la Patagonia después de dos años de pasar penurias, haciendo mensuras. Por cuestiones políticas sólo pudo cobrar parte de lo que pensaba ganar con dichas mensuras. Es más, para cobrar la parte que el gobierno le reconoció, debió litigar varios años después de haber terminado su trabajo. Esta situación lo desalentó de tal forma que ya había tomado la decisión de vender todas sus propiedades e irse a vivir a la Patagonia a "criar ovejas". Pero el destino cambió su rumbo y finalmente en Octubre de 1918 decidió comprar, con parte de sus ahorros, un campo sobre la actual Ruta Nacional 8, en Villa Mercedes (San Luis).

Margot y José se casaron por Civil en la ciudad de Buenos Aires el 2 de enero de 1919 y en el Acta de Matrimonio correspondiente reconocieron como hijos de ambos a Ana Margarita nacida en 1913, Belisario José nacido en 1916 y Delia Rosa nacida en 1918. Inmediatamente después parten a su destino “La Saboya”, el campo que mencioné y que mi abuelo había comprado. Esta parte de la vida de la familia Fuschini Dartigolles fue una etapa difícil porque la familia vivió en el campo y de lo que el campo les pudo brindar. Ninguno de los integrantes de la pareja tenía experiencia en administrar un campo. En esa época, el campo no tenía electricidad pero sí agua potable de napas subterráneas, que José Fuschini había encontrado y que era extraída por un molino que instaló. En esa Villa Mercedes de la segunda década del Siglo XX, nacen otros cuatro hijos: Mario en 1920, Marta en 1921, Blanca en 1922 y Eduardo en 1924.

Año 1924 - Los siete hermanos en La Saboya
De izquierda a derecha Blanca (Negra), Mario Carlos, Marta,
Anita con Eduardo en brazos, Delia Rosa y Belisario


Los Fuschini Dartigolles conformaron así una familia numerosa entretanto José no tenía un trabajo seguro. Por suerte en el año 1925 la situación familiar mejoró ostensiblemente cuando José pudo ingresar nuevamente a la Dirección de Irrigación de la Nación, como personal estable, pudiendo mantener su trabajo profesional paralelamente con su trabajo en el campo.


Año 1924 - Margot y José en La Saboya


Una de las mayores preocupaciones que siempre tuvo mi Abuelo José fue la educación de sus hijos, y cómo dárselas si ellos vivían en un lugar ciertamente remoto. En una carta escrita por José a su sobrina Delia Rosa Zinny en el año1920 le dice “… Anita, mi hija mayor, va a cumplir 8 años y apenas sabe leer, y lo que es peor no tengo por un tiempo la esperanza de poderla educar, lo que en este retiro de sacrificio es desesperante porque no conduce a nada. La educación de mis chicos es cuestión material. Cada ataque a éste es un ataque moral. Imagínate que impresión me habrá producido un incendio que vino anoche desde un campo vecino y me ha quemado más de 1000 metros del alambrado y 30 hectáreas de campo con las reservas del invierno…”.

Por esta razón en 1922 mi mamá Anita vivió un tiempo en Vicente Lopez, en Buenos Aires, en casa de Rosa, la hermana mayor de José. Allí Mamita tuvo la oportunidad de prepararse en la escuela y dar algunos años libres. Gran parte de sus estudios los hizo como autodidacta, sola en el campo, y así se preparó para rendir libre sus exámenes. Así también pudo estudiar inglés con los discos del Liguaphone, tocados en una vitrola a cuerda, cuestión que le permitió hablarlo bastante bien.

Año 1922 - Anita y sus primos Guillo, Antonio y Nené Zinny en Vicente Lopez


En el año 1934 Anita rindió libre 3º año del bachillerato en el Colegio Nacional “Juan Esteban Pedernera” de Villa Mercedes y en 1935 cursó normalmente el 4º año y rindió el 5º año libre en el mismo colegio. Con 23 años recién cumplidos se recibió de bachiller a principios del año 1936 y decidió ir a estudiar a la Universidad Nacional de La Plata. En esos años no era común que una mujer estudiara una carrera universitaria y menos que se fuera a vivir a una pensión tan lejos de la familia.

Se inscribió en la Facultad de Humanidades, en el Profesorado de Enseñanza Secundaria, Normal y Especial de Matemáticas y Física y en cuatro años hizo la carrera con muy buenas notas. Se recibió de Profesora de Enseñanza Secundaria, Normal y Especial de Matemáticas y Física el 25 de Marzo de 1939.

Año 1941 - En La Plata con amigos


En abril de 1939,  se inscribió en el Doctorado de Ciencias Psicomatemáticas de la Universidad Nacional de La Plata y  aprobó los 1º y 2º Años del Doctorado de Física. Cursó el 3º año y debido a un accidente tuvo un desprendimiento de retina que la obligó a abandonar los estudios del Doctorado.

Anita comenzó a desarrollar su labor docente y dio clases en variados establecimientos secundarios:

Entre los Años 1941 a 1959:

  • Escuela de Comercio Nº 6 de Capital Federal
  • Escuela de Comercio Nº 1 de Capital Federal
  • Colegio Nacional Nº 10 de Capital Federal

Entre los Años 1959 a 1962:

  • Colegio Nacional de Morón
  • Escuela de Comercio de Morón

Entre los Años 1963 hasta jubilarse en 1970:

  • Escuela de Comercio dependiente de la UNCuyo (San Juan)
  • Escuela Industrial dependiente de la UNCuyo (San Juan)
  • Liceo Nacional de Señoritas (San Juan),
  • Escuela Normal Sarmiento (San Juan)

También se desempeñó como profesora en establecimientos terciarios de la ciudad de San Juan durante los Años 1965 a 1970. En el Instituto Nacional del Profesorado Secundario (San Juan) Anita dictó sus clases como Profesora de Metodología y Práctica de la Enseñanza de las Matemáticas

La dedicación de Anita como docente y el profesionalismo con que encaró su carrera le valió el reconocimiento del Ministerio de Educación y Justicia de la Nación. Así, en las Hojas de Concepto de esa repartición elaboradas anualmente al término del ciclo lectivo, los profesores eran calificados. Así Anita fue calificada con los siguientes conceptos:  

  • Año 1963: “… Excelente preparación general y profesional. Responsable en su labor, estricta y logra los fines formativos de la materia que dicta…”.
  • Año 1964: “… Culta. Muy buena preparación profesional. Muy trabajadora y responsable. Se renueva constantemente. Es justa en la evaluación…”
  • Año 1965: “… Muy buena preparación matemática. Estudios superiores de Matemática Moderna. Buenas condiciones docentes. Visualiza muy bien sus clases. Ascendente…”.
  • Año 1966: “… Amplia cultura general. Muy preparada en las materias que dicta. Tiene inquietudes y se actualiza. Posee vocación docente. Se preocupa por hacer accesible y formativa la enseñanza de la matemática…”.

Se jubiló en Junio 1970.

En cuanto a su vida privada conoció a mi papá cuando estaba estudiando en La Plata. En realidad fueron amigos durante muchos años y un día hicieron el “clic” y se casaron en febrero de 1946. Los primeros años vivieron en el barrio de Palermo, en la calle Salguero 1881. Mi papá trabajaba en el Ministerio de Aeronáutica y mi mamá era docente en escuelas de la Capital Federal.

Febrero 1946 - Anita y Vito en Montevideo durante su luna de miel


Cuando mi papá fue becado a Inglaterra viajó solo, embarcándose el 29 de Septiembre de 1946. Mi madre lo siguió en Diciembre de ese año, ya que estaba embarazada de su primera hija. Era época de postguerra en Inglaterra y allí faltaban provisiones de todo tipo, y las que había, en realidad estaban racionadas. Debido al embarazo su ración era un poco mayor que para el resto de las personas. El 10 de Mayo de 1947 nació mi hermana mayor Mónica Beatriz en el Princess Beatrice Hospital de Londres, quien lamentablemente falleció pocos días después. No puedo pensar en los sentimientos que habrán tenido mis padres en ese momento, y en particular Mamita, en aquellas circunstancias, lejos de la familia, recibiendo cartas de felicitación por el nacimiento y al mismo tiempo, por una cuestión de distancias de aquella época, con la gran pena de haber perdido a su niña. Las cartas en aquella época tardaban días o semanas, y muchas de ellas “se cruzaban en el aire” llevando y trayendo noticias a veces “encontradas”,  llevando y trayendo las buenas y malas noticias.

De vuelta en Argentina mis padres se afincaron en Buenos Aires y allí nací yo en Octubre de 1948, Patricia en Septiembre de 1950 y Gustavo en Diciembre 1951. Continuábamos viviendo en el departamento de la calle Salguero y nos mudamos a una casa en Haedo sobre la calle Fraternidad 521.

Nuestra vida en Haedo, en la casa de la calle Fraternidad primero y en nuestra casa de la calle Artes 573 después, fue una vida de barrio. Mi papá trabajaba en Buenos Aires y mi mamá también viajaba a dar clases al centro. Muchas veces nos cuidaba mi tía abuela Palmira, la tía de mi papá, o Martha, la tía de mi mamá. En el año 1959 pidió traslado de las horas a Morón para evitar los largos viajes al centro y hasta que nos mudamos a San Juan, dio clases en el Colegio Nacional de Morón.

Año 1957 - Anita, Vito y sus tres hijos en la puerta
de la casa de Haedo en la calle Fraternidad
El hecho de mudarnos a San Juan, a una ciudad más chica que Buenos Aires, fue fundamental en la vida de todos los integrantes de la familia. Mamita pidió traslado nuevamente de sus horas y siguió trabajando como docente hasta que se jubiló. Nos mudamos a San Juan en 1962 y mis padres vivieron allí hasta su muerte. Tuvieron una vida muy linda y tranquila con muchos amigos. Mi casa siempre fue una casa abierta. Todo el que llegaba era bienvenido y enseguida se organizaba una picada, una cerveza y hasta un colchón tirado en el piso para el que pernoctaba en casa. Ese modo de ser fue característico de mi mamá, que a su vez lo había mamado en su casa de Cruz de Piedra o en Villa Mercedes donde también mis abuelos vivieron muchos años y siempre fueron muy hospitalarios.

Navidad 1967 en San Juan con amigos
Siempre fue una mujer adelantada al tiempo en que le tocó vivir. Por eso nuestra educación fue muy particular por la libertad que tuvimos para tomar nuestras propias decisiones. Disfrutó y cuidó de sus nietos y tuvo con ellos una relación muy especial. Le gustaba armar rompecabezas y se pasaba horas haciéndolos. Fue una gran lectora, pese a su problema en la vista, le gustaban los buenos libros y la poesía. Siempre disfrutó de las pequeñas cosas de la vida. Aunque vivimos siempre lejos de los familiares mis padres mantuvieron una excelente relación con todos y no perdieron oportunidad para compartir con ellos fechas especiales. Mientras pudieron ayudaron moralmente o pecuniariamente a la familia.

Ya jubilada se sentaba a leer estas cartas que hoy me permiten escribir lo que les cuento y disfrutaba leyéndolas. Nunca hizo mención de ellas ni nos contó nada de su vida. Fue muy reservada desde pequeña.

Ironías de la vida … Mis padres se casaron por civil en Montevideo, por las dudas que tuvieran que separarse algún día. Así cumplieron juntos 55 años de casados !!! 

Febrero 1996 - Festejando las Bodas de Oro en Villa Giardino con toda la familia

Mamita falleció en San Juan a los 90 años de edad, el 18 de Diciembre de 2003. Papito la siguió enseguida…



5 comentarios:

  1. No tengo palabras, es muy emotivo todo lo relatado.
    Te quiero mucho mami!!

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  2. Agrego los comentarios que me hicieron llegar por mail o por Facebook

    Patricia Dufour
    Que te puedo decir, no solo me encantó sino que conocí muchos momentos de su vida que no sabía o que no lo tenía ubicado cronológicamente.
    Jamás pudo pasar por su mente que una hija suya se ocupara de ella de esta manera a 100 años de su nacimiento, Mamita estaría orgullosísima de lo que pudiste extractar y escribiste
    La verdad es, que en toda la familia, que es grande, no hay nadie con tus características para hacer algo parecido. Qué suerte que estas Monicacha, lucida y con tiempo para dejar esta historia al alcance de todo el que quiera leerla.
    Me siento muy orgullosa de vos y lo que estás haciendo y ellos lo estarían aun mucho más!!!!!
    Patricia

    Sara Maloney
    Querida Amiga: Me encanta tu relato ¡Seguramente ellos desde otra parte, estarán orgullosos y pensando en la tarea cumplida que fue su familia.
    Doy fe, al menos de mi amiguita, que cumplió con lo mamado, ser libre …..
    Es una virtud, en vos, saber plasmar los recuerdos, hilvanar las historias y lograr hacer esto, que considero, un homenaje a tu ¨ mi mamá ¨ como dices. ( acordate que siempre discutíamos como se decía, mamá a solas o ¨ mi mamá ¨ jaja
    Un abrazo.

    Marcelo Rins
    Muy lindo y emocionante tu recuerdo, le comentaba a Patricia que en realidad eran épocas difíciles para todos, más si querían estudiar. Tanto mi madre como mi padre tuvieron también una niñez y juventud muy difíciles, por eso creo que no podemos quejarnos de lo que nos tocó a nosotros y menos argumentar que nos sacrificamos para poder ser profesionales, porque seriamos injustos. Menos aun nuestros hijos.
    Besos Marcelo

    Macarena Laso
    Querida Mónica!!, muchas gracias por compartir este pedacito de tu corazón con nosotros, la verdad es que Anita y Vito siempre fueron muy especiales para nosotros y tenemos los recuerdos más lindos con ellos!!!.
    Cuando leí la parte de su vida en Londres y el nacimiento de tu hermana mayor, me puse a investigar y encontré, que el hospital que en su momento era Princess Beatrice, hoy es el mismo hospital donde nació Clara (Kensington Chelsea and Westminster Hospital) que increíble no?, de todos modos no es el mismo edificio.
    Bueno espero que sigan muy bien!! Gracias por compartir esto tan lindo!.
    Vi fotos muy lindas de ustedes con Cande ,Sebas y toda la familia. Qué bueno que se pudieron ver!.
    Si Dios quiere nos veremos pronto!! Un beso gigante a toda la familia!.
    Maca

    Blanca Gunche
    Querida Mónica, con gran emoción he leído todo lo que escribiste de Anita., mi madrina de bautismo, junto con Gustavo (Tavo) Gunche realizado en Bs As el 2 de mayo de 1946, en la Basílica del Espíritu Santo, Parroquia de Guadalupe.
    Me han venido todos los recuerdos de haber pasado gran parte de mi vida en la casa de Uds, que se demuestra en muchísimas fotos de familia.
    Un gran abrazo para vos y te felicito por toda la investigación que estás haciendo.
    Besos Blanquita

    Horacio Cowper
    Mi bella tía, Ana Margarita Fuschini de Dufour, como le decíamos cariñosamente, o "Anita" no solo fué madre de sus tres hijos a los cuales educó maravillosamente, sino que también amparó a otros que la recordamos con mucho amor y a su vez hicimos que nuestros hijos la reconocieran como su abuela . . . ¡¡La extraño tanto!! . . . todavía la recuerdo recostada en su cama leyendo un libro . .

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  3. Eduardo Martinez Wurster
    Muy bonito lo que has escrito, Mónica. Doy fe del trabajo de investigación que hiciste y de lo difícil que te resultó compaginar esas ideas dispersas entre tantos papeles "amarillentos". ¿Recuerdas que al principio no sabías por dónde ni cómo empezar? Creo que resultó un apropiado homenaje a Anita.

    María Eugenia Otero
    Leerlo es muy lindo, porque describe tu trabajo de investigación, pero mejor fue con la dulzura que lo contabas la otra noche...son esos momentos sin desperdicios de una noche de amigos....

    Alex Kupfer
    Invalorable documento y recuerdos Moni ! y lo mejor, conmemorar la fecha de su "nacimiento" !
    Cariños

    Celina Fernandez
    Tía muy lindo lo que escribiste sobre Anita, y muy interesante la historia. Realmente unos adelantados tus padres y abuelos también.
    Un beso grande en este día tan especial.

    Candelaria Laso
    Lindísimo el post de Anita!

    María Marta Fuschini
    Qué lindo lo que escribiste!!!! Y me permitió conocer más de tu mamá y del resto de la familia. Hermoso!!!!!!!!!! Besos.

    Pier Giorgio Caneva
    Te felicito por el trabajo que te has tomado, y tienes que estar orgullosa de tus progenitores , y de tus ascendientes, luchadores como todo descendiente, (de los barcos) como se construyo el país. Un gran trabajo. Un beso Pier Giorgio

    María Cristina Dobjanschi
    Cuando evoco la época del Barrio aparecen tus padres: yo a tu mami siempre me la imagino con un libro y a ambos como incansables lectores, el pasillo de tu casa era prueba de ello! (mencionaste esto?)
    Mis oraciones de mañana la van a incluir! a los dos!
    Fantástico tu trabajo
    Besos
    PD tal vez alguna vez tenga la oportunidad de saber si Eduardo se pone el delantal de cocina sólo porque le queda genial!!

    Victoria Gismondi
    Lindísimo Monica, me encanto, que lindos padres!!! y que investigación que hiciste, te felicito!!!

    Adriana Corsi
    Que hermosa forma de recordar a una gran madre

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  4. Mas comentarios que me hicieron llegar los amigos ...

    Julio Benes
    Querida Mónica:
    Fue un placer leer la historia de Anita. Vos sabés que fuimos muy buenos amigos durante decenios pero recién conozco ahora cómo había sido su vida antes de conocernos, gracias a tu blog, y llenamos así un hueco importante.
    Te felicito porque no debió ser nada fácil poder rearmar este rompecabezas con tan pocas piezas.
    Vos sabés que Silvia y yo la quisimos mucho, tanto como a Vito y recordarla en esta fecha especial fue muy grato.
    Gracias por compartirlo con nosotros.
    Un beso. Julio

    Florencia Gallardon
    Hola Mónica: me llamo Florencia Gallardon, vivo en La Plata, y fuimos con mi familia muy amigos de Chicha, Cacho, Oscar y Cecilia, durante los últimos 30 años. Conocí a tus padres, Anita y Vito una tarde de hace mucho tiempo en la quinta. Pero sobre todo los conocí por los relatos de Chicha y los recuerdos de Oscar y Cecilia. Me encantó cómo armaste la historia familiar. Me parece un una hermosa forma de recordar a tu mamá, te felicito.

    Lucrecia Zeballos
    Me encanto leer todo esto!!!. Es como sumergirse en una novela histórica que me fascinan!!!
    Solo que se me hizo un poco de lio por ahí. Sería bueno un arbolito genealógico!!! Plis armalo!!!!

    Eloisa Moyano
    Hola Mónica !!!!
    Me encanto !
    Deberias ser escritora, gionista , investigadora , historiadora, agente especial o espacial...o algo así... si es que no lo sos...o todo eso...
    Gracias por los recuerdos y esa "cosa familiera" que me retrotae a mi infancia...
    Abrazo Eloi

    Maria Laura Dufour
    ¡Que linda historia Moni. Realmente no sabía nada de la vida de tu mami y leyendo esto me acordé de una anécdota que contaba Vito de cuando recién se mudaron: acostumbrado a salir corriendo de un lado al otro en los distintos trabajos , siempre llegaba a tomar los medios de transporte corriendo, fue así que cuando llegaron a San Juan, para ir a dar clases creo que había colectivos muy espaciados, para no perder la costumbre Vito llegaba corriendo a la esquina a tomarlo, cual no fue su sorpresa que a la segunda vez que iba corriendo oyó que el colectivo, le tocaba bocina y lo esperaba. Besos mil Pelusa

    Vicente Valdez
    Hola Mónica: me encanto el relato que hiciste de la vida de tu MAMITA. Debieras seriamente pensar en continuar con la literatura y seguir escribiendo sobre algunos otros temas. Comencé a leer y no pude dejar la lectura hasta el final, es decir me atrapó el autor. Una mujer muy de vanguardia y mesurada.
    También me gustó muchísimo lo que escribiste anteriormente de tu padre, todo un tipazo.
    Felicitaciones saludos a Eduardo y a continuar escribiendo, todavía hay tiempo. Un beso. Chamaco

    Mara Mentoro
    MONICA TE FELICITO POR EL BLOG. ES INCREÍBLE LO QUE ESCRIBISTE, PUDIENDO RESUMIR LA VIDA DE TU MAMI Y PERMITIENDO, DE ESA MANERA, QUE GENTE QUE NO LA CONOCIÓ EN PERSONA SE PUEDA IMAGINAR LA FUERZA DE VIDA QUE TENIA
    MIL FELICITACIONES DE NUEVO. ES HERMOSO PODER ESCRIBIR HISTORIAS DE LA FAMILIA
    BESOS MARA

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  5. La primera vez que lo leí no pude parar de llorar y sentí mucha tristeza por su ausencia.
    Hoy lo he vuelto a leer y me he emocionado mucho.
    Siempre pensé que mis abuelos serían eternos y en cierta forma lo son. Siempre están y estarán en mi corazón, en mis pensamientos y en un millón de recuerdos y anécdotas.
    Gracias Mónicacha, por escribir y por compartir.
    Te quiero mucho 💖

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